Este fin de semana aproveche a irme una escapada a San Javier a pesar de los pronósticos de lluvia, así que pase a buscar a mi amigo Rodrigo y partimos al guaycuru en busca del algún cachorro que ande dando vueltas, la verdad el pique estaba muy flojo, al medio día nos dimos cuanta que nos habíamos olvidado la parrilla, así que improvisamos unas estacas y asado a las llamas, solo pude sacar uno y a media tarde se vino una lluvia torrencial que nos mojo de pies a cabeza, a la vuelta encontramos una lancha que también corría la misma suerte así que decidimos viajar juntos, fue entonces que divisamos un chancho cimarrón y con unos tiros certeros lo abatimos.
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